Para Andrea Seidel
Las magnolias están entre las flores más antiguas del planeta. En Japón se cultiva sobre todo la que aparece en la foto: una variedad importada de China en el siglo VII, 木蓮, 木蘭 mokuren (Magnolia liliflora), de hojas grandes con tintes rosáceos de variable intensidad. La nativa 辛夷 kobushi (kobus magnolia; Magnolia praecocissima) es más pequeña y aún se encuentra silvestre, como indican las denominaciones 山辛夷 yama kobushi, camelia de montaña, y やまあららぎ yama araragi; una variedad más delicada es しでこぶし shide kobushi, Magnolia stellata.
Todas estas florecen antes que la mayoría de los cerezos, y son igualmente efímeras. De ahí el curioso nombre antiguo 田打桜 tauchi sakura, “cerezo del inicio de las plantaciones”, que pudiera indicar cómo el rito colectivo japonés que colma los prados y vacía las botellas se liga en el origen a los ciclos agrícolas, cuando la orientación de las flores ayudaba a determinar el calendario de la siembra y podía augurar una buena cosecha, antes de que las cortes de Nara y Heian transformaran tantos rituales religiosos en experiencias estéticas seculares, y la época de Edo en celebraciones gregarias. Así podría explicarse también que las magnolias sean símbolo de confianza y se recomienden para combatir la incertidumbre.
Pero hay también una flor de magnolia al principio del verano: 朴の花, ほおのはな hoo no hana, fragante y que se emplea para preparar té y hoobomiso 朴葉味噌 ほおばみそ: pasta de miso con magnolias asadas y cebollín.
En el margen del río Yodo, que corre del Lago Biwa al puerto de Osaka, grabo unos trazos cambiantes. "Esto es lo malo de no hacer imprimir las obras: que se va la vida en rehacerlas", escribió Reyes. Esto es lo bueno de la vida: que corre. Como lo que aquí se publica no se imprime, se rehace.
¡Qué bello! La imagen, la historia, el sentido ritual y su significado soccial me encantó.
ResponderBorrarGracias por compartirlo.
Saludos