jueves, 11 de octubre de 2007

Dios, como siempre, está de más


The Visitor, originally uploaded by ionushi.

Sobre todo por sus Microgramas (1926 y 1940), es habitual contar a Jorge Carrera Andrade (Quito, 1903–1978) entre los poetas hispanoamericanos que han practicado con mejor fortuna el haiku, siguiendo a Tablada. Pero sus versos no están muy cerca de la sensibilidad japonesa. De ese libro recoge la Antología poética que Vladimiro Rivas Ituralde preparó para el Fondo de Cultura Económica (2000) este poemita:

     Lo que es el caracol

     Caracol:
     mínima cinta métrica
     con que mide el campo Dios.

Es variación de un haiku muy conocido de Issa Kobayashi (1763–1827):

       かたつぶりそろそろ登れ富士の山

       katatsuburi 
soro-soro nobore 
fuji no yama



     Caracol: ve,
     poco a poco, ascendiendo
     el Monte Fuji.

Al poema del ecuatoriano le sobran el título, la mínima cinta métrica y Dios. ¿Para qué querría, en Su omnisciencia, medir lo que fuera?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Aurelio, tomé tu curso en la Casa del Poeta y hoy, por fin, adquirí "Luna en la hierba"...soy profesor en la UAM, en filosofía y comunicación, y exploro los vínculos de Heidegger con Nishitani, Nishida y Ueda. Exploro, ahora, una idea tuya: con mis alumnos esbozamos la posibilidad de hacer versos cortos en celular(con pretensiones de haikú o tankas)...ya te contaré. Saludos.
Marco Millán

Paloma Zubieta López dijo...

Querido Aurelio: coincido contigo con que aquí, Dios está de más. El experto eres tú, pero en simple lenguaje de una neófita en el tema, creo que además, el haikú atrapa instantes y sugiere mucho más de lo que dice, mientras que en el caso que muestras de Carrera Andrade, sólo se lee lo que está... Un fuerte abrazo por este momento estelar y besos.